Cierra algunas puertas. No por orgullo, ni por soberbia, sino porque ya no llevan a ninguna parte...*"
Paulo Coelho
Es inevitable que al cambiar, al movernos, al irnos, se cierren algunas puertas y quizá sea lo mejor que pueda ocurrir. Lo curioso resulta no querer cerrar totalmente una puerta que ya sabemos no nos va conducir a nada, o que nos va llevar a un pasaje desafortunado de la vida...
Los seres humanos somos seres rutinarios, nos acostumbramos tanto a aquello que hacemos que, aunque nos haga daño, lo continuamos haciendo sin reparos. Cerrar una puerta implica un poco de sacrificio, pero también implica observar otras puertas que se han abierto y que probablemente nos conduzcan a un lugar mejor...
No tema cerrar la puerta, que no está abierta...
2 comentarios:
Resulta de alguna forma doloroso leer lo que resulta ser una muy posible situación en lo que se ha convertido en existencia, en eso que en algún momento se llamó vida. Confieso algo... el pánico de perder a esta persona me petrifica aunque, después de todo que mas da, es muy posible que esté divagando sobre cerrar una puerta que muy posiblemente no esté abierta... Saludos desde Colombia viejo
Para cerrar la puerta o quemar los puentes solo se necesita dar un paso, un empujón, encender esa chispa que se llevara todo, pero como cuesta dios mío, como cuesta en ocasiones!
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